Durante más de una década Dragon Quest y Final Fantasy fueron las dos grandes rivales del rol japonés, una batalla que llegó a su fin cuando Squaresoft y Enix se unieron. Recientemente el creador de Dragon Quest, Yuji Horii, habló sobre las diferencias entre estas sagas, y también ha comentado uno de sus Final Fantasy favoritos.
Horii admite que como aficionado al rol también disfrutaba de Final Fantasy, pese a que cada juego tenía su personalidad: en Dragon Quest el protagonista es el propio jugador, por eso los héroes no hablan, mientras que en Final Fantasy lo es el personaje de la historia (el jugador hace más espectador).
El creador asegura que le gusta Final Fantasy y la entrega que más le impactó no fue Final Fantasy VI, VII, VIII o IX, considerados por muchos algunas de las entregas más icónicas de la saga: «Cuando vi por primera vez Final Fantasy X, recuerdo sentir que era la perfección definitiva de Final Fantasy«.
El último Final Fantasy tradicional
Pese a que era un juego más lineal que otros Final Fantasy, el juego protagonizado por Tidus encantó a toda una generación: pulió el sistema de combate por turnos, lo amplió con la posibilidad de cambiar miembros del equipo activo e hizo interactivas a las invocaciones. Su éxito sirvió además para tener una secuela. Después llegaría Final Fantasy XII, también muy bien valorado, pero con cambios drásticos en sus batallas.
En 2023 se rumoreó que Final Fantasy X tenía un remake en desarrollo, aunque son pocas las pruebas que respaldan esta información. De hecho, Final Fantasy IX se ha filtrado en muchas más ocasiones (y llegó a aparecer mencionado en una lista filtrada de Nvidia) pero el silencio de la editora hace pensar que quizás el proyecto está cancelado.
